viernes, 23 de diciembre de 2011

NOCHES BUENAS

Cuando vengo a este espacio, donde soy solo yo, donde puedo desnudar mi alma de la forma que mas me plazca, siento mi paz interior surgir como un cántaro de agua fresca y transparente.
La vida con mi hija transcurre rápido, cada dia me demuestra algo nuevo, en su forma de mirar, en su manera de tomar mi dedo, algo nuevo cada dia y asi será por los años, algo nuevo cada dia.
Anoche mientras intentaba conciliar el sueño, reconocí dentro mio un sentimiento que jamás he vivido, la Navidad.
Hoy puedo reconocer que no había pasado jamás una Navidad.
Solo cuando se tienen hijos esta fecha se vuelve importante, única y emocionante.
Como no me ha sucedido nunca, he dejado las compras navideñas para última hora.
Cada año compro regalos para mis sobrinos, y los coloco debajo de mi árbol de Navidad, donde quedan esperando los gritos alegres rompiendo los envoltorios. También suelo disfrazarme de Santa Claus, Papa Noel en mi país, tan solo para alegrarlos (aunque muchos de ellos se burlan de mi y me descubren guardando silencio para los mas pequeñitos).
Este año no pude despegarme de Azul.
Llegaba cada dia desesperadamente para tomarla entre mis brazos, y quedarme ahi, mirándola, perdiéndome en sus ojos brillantes, horas y horas en silencio, sonriendo y a veces cantándole.
La beso suavemente, como una caricia, y ella se duerme conmigo, en mis brazos, como en su mejor cuna. Y aunque no se cómo sucede, me quedo quieto todo el rato que dormimos, ni siquiera pestañeo, tan solo para no lastimarla ni despertarla.
Yo que dormía tan despatarrado e inquieto... ahora soy una estatua... porque mi niñita duerme conmigo! ella lo ha logrado.
Los padres al serlo, forjamos superpoderes, los cuales desconocíamos antes. Inmobilidad absoluta cuando dormimos con bebé, oído bien agudo para escuchar un infinitamente pequeñito quejido desde lugares lejanos, presentimientos varios (ya va a despertar, por qué llora, por qué ríe, si tiene hambre, cuándo es necesario cambiar su pañal, etc), y esa facilidad para permanecer despierto muchas horas, feliz junto a una cuna, cantando despues de haber trabajado todo el día agotadoramente. Eso que antes nos alteraba el dia (como manchar una camisa con café), hoy dia se lleva con total normalidad... babitas cerca del cuello de mi camisa, vómitos que son limpiados con sonrisas, olores que no son olores a nuestro olfato.
Esos superpoderes se alimentan con la sonrisa de Azul, que es idéntica a la de su mamá, para placer de mi vista y derrumbe de mi sanidad mental jaja.
Voy a enloquecer de amor.
Mis dos ángeles me tienen totalmente cautivo en una prisión de chocolate con barrotes de caramelos rellenos de leche tibia y perfume a bebé.
Como ven, me desvío de lo que estaba contando para hablar de Azul jaja es asi todo el tiempo, entienden ahora por qué compré los regalos Navideños hoy? jaja
Como les contaba, hoy por la tarde, tomé unas horas para comprarles regalos a mis dos amores, a mi niña los juguetes mas hermosos y coloridos, y a mi mujer ropa, zapatos, carteras, perfumes, flores y todo lo que pueda hacerla feliz. Y también compré como todos los años para mis sobrinos.
Cargado de bolsas bajaba del auto, cuando iba saliendo de mi casa, mi hermano. Nos saludamos rapidamente porque iba un poco apurado y cargando los paquetes entré.
Grande fue mi sorpresa cuando vi, que donde años anteriores estaba lleno de regalos para mis sobrinos, este año estaba repleto de regalos para Azul !!!! todos mis sobrinos y mi familia habian dejado regalos para mi niña... no quedaba lugar libre debajo de mi árbol y entre sus ramas.
Juli me veia con Azul en sus brazos y sonreía esperando mi reacción.
Apoyé los paquetes sobre el sofá, me senté en el, apoyé mis manos sobre la cara y comencé a llorar como hacía mucho tiempo no lo hacía... pero esta vez sonriendo... ante la maravillosa visión de mi hija en brazos de mi amor... el mejor regalo de Dios.
Todos aquellos con los cuales, en años anteriores, he tapado la ausencia de mi hija, hoy celebran conmigo y le traen regalos, ese gesto me emociona hasta las lágrimas.
Qué mas puedo pedir?
Ya he retirado mi traje de Papá Noel de la tintorería, y está listo para el show de todos los años... el show del tío loco, que disfruta de las risitas y las burlas de sus sobrinos, que soporta puntapies y hasta que lo arrojen a la pileta, que juega y deja que le bajen los pantalones... porque ellos rien, y rien y se tiran al piso de la risa, y les encanta... y esas vocecitas que agradecen luego con miradas cómplices y preguntas inocentes: TIO LO VISTE A PAPA NOEL ?? TIO! TIO! mientras me abrazan y se me lanzan encima... esas vocecitas que con el tiempo se transformarán en una, en el sonido que soñe por tanto tiempo... ese que tal vez no sea en Navidad, pero que será mi mejor regalo, el momento en que Azul también ría con mis locuras y me llame PAPÁ.